CRUZADOS
La Textil

Martes, 12 de abril de 2022

Es evidente que no era la banda que sorprendió a mediados de los 80, que ya no está Humberto Tito Larriva, líder indiscutible de la formación, que dos de sus miembros originales han pasado a mejor vida, Marshall Rohner en el 2005 y Chalo Quintana en el 2018, por lo que sólo contamos con la presencia de un miembro original, el bajista Tony Marsico, quien no se ha cansado de explicar que cuenta con el beneplácito de Tito para volver a hacer rodar la banda. Para ello ha tirado de amistades y se ha apalancado el bloque duro de Little Caesar, quienes por cierto estarán en Barcelona el 22 de septiembre, los guitarras Loren Molinare y Mark Tremalgia y el vocalista Ron Young, con la presencia del batería Rob Klonel. Cruzados tiene un legado, corto pero intenso, dos álbumes maravillosos como son «Cruzados» del 1985 y «After Dark» dos años más tarde, para desaparecer en el limbo de las promesas perdidas. Pero la nostalgia no lo es todo y se han puesto al día con una auténtica bomba de rock and roll llamada «She’s Automatic» editada este mismo año.

De hecho la base del concierto es el álbum que han grabado estos maestros del rock angelino, descargando los once temas del mismo sin demasiada concesión al recuerdo, que cubrió momentos estelares del recital, pero que se alejó inteligentemente del grupo tributo a la banda madre, algo que desgraciadamente ahora es muy habitual. Todo el repertorio suena duro, no estamos en los 80 y nos separan tres décadas y media de evolución o retroceso, dependiendo de quién lo mire, pero la presencia de los Little Caesar aportan un sonido más afilado y rockero que se agradece encima de un escenario.
Comenzaron el concierto con tres temas del nuevo disco, por si alguno no lo tenía claro, «She’s Automatic», «Nine Million Tears» y «On The Tilt A Whirl», para dejar la primera joya robada a la morriña, «Bed Of Lies» que sonó maravillosa y en la cual todos habíamos olvidado a Tito definitivamente. La sala La Textil bastante llena para ser la primera semana de vacaciones para algunos privilegiados y martes, día complicado por definición. Un tema más y cae otro dardo de añoranza, «Rising Sun» y sorpresa, «After Dark», que por mucho que busques en el disco del mismo título no lo encontrarás, pues se editó tan sólo como sencillo y pasó a formar parte del primer álbum fuera de Cruzados de Tito & Tarantula.

Para los que llevábamos décadas soportando la evidencia de que no podríamos escuchar ciertos temas en directo, el concierto fue un regalo para los oídos y un castigo para los huesos y sobre todo las cervicales, que al día siguiente no se podían mover completamente anquilosadas, pues me pasé todo el set haciendo un continuo «Status Quo».
Todo el repertorio estuvo brillantemente escogido para ir rellenando los posibles huecos de melancolía con temas añejos que sonaban completamente nuevos y apenas dejaban que los pies pararan quietos en el suelo. Se intercalaron «Don´t Throw Stones», «Hanging Out In California», el maravilloso «Motorcycle Girl» por el que ya hubiera valido la pena venir al bolo, para rematar el bis con «Back to the House That Love Built», la versión de The Sonics «Have Love Will Travel» y una electrificante «Johnny Pay To Play».

Uno de los conciertos más divertidos a los que he asistido, cierto es, que soy fan de la banda desde 1985, pero lo cortes no quita lo valiente y fue toda una lección de rock’n’roll, sin mayor pretensión que pasar una gran velada y os aseguro que lo fue, joder que si lo fue.
Texto y fotos: JLBad


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