BAD MUSIC RADIO

MUDHONEY + LOS CHICOS
Sala Razzmatazz 2. Barcelona
15/09/2022

Las ocho de la tarde de un jueves cualquiera, no más de cien personas a esta hora en la segunda sala del complejo Razzmatazz, puntuales, preparados y entonados para disfrutar del bolo de LOS CHICOS. Me habían hablado muy bien del directo de estos madrileños y superaron con creces mis expectativas, salieron a morder yugulares desde el segundo uno y en la escasa media hora de la que dispusieron pusieron patas arriba la sala con su torbellino de Punk and Roll de la escuela Detroit y el Rock australiano más salvaje. En treinta minutos se las ingeniaron para interpretar más de una decena de temas propios y una enorme versión del 1969 de los STOOGES a la vez que se recorrían el escenario de punta a punta millones de veces, se bajaban a tocar entre el público, bromeaban entre ellos y hacían el cabra todo lo que podían y les permitía el código penal. Hiperactiva toda la banda especialmente su vocalista Rafa que se erigió como amo y señor del cotarro y que incluso se subió a la barra a cantarse un tema. CHICOS: os habéis ganado un fan para toda la vida.

   Y tras este sabroso aperitivo, el plato fuerte, ni más ni menos que MUDHONEY, desde Seattle, Was, creadores y supervivientes del movimiento grunge. Curioso caso el de esta banda que aún habiendo estado en el meollo de la escena, incluso antes, vio como los NIRVANA, SOUNDGARDEN, PEARL JAM, etc. se lo comían todo mientras ellos nunca han pasado de ser una banda underground, alcanzando con el tiempo el estatus de banda de culto. No será por la calidad de sus discos, altísima, ni mucho menos por sus incendiarios directos.

Mi única ocasión con ellos en vivo fue en un lejano Primavera Sound, cuando aún se celebraba en el Poble Espanyol y es uno de los conciertos más distorsionados y ruidosos que recuerdo, aquí en la Razz sonaron más limpios pero sin perder un ápice de potencia. Comandados por el gran Mark Arm, el cual empezó con la guitarra colgada para acabar sin ella en la última parte del concierto, intimidante plantado en medio del escenario, cantando con actitud desafiante esos himnos generacionales que no podían faltar como «Good enough», «Suck you dry», «I’m now» y sobre todo «Touch me, I’m sick», lo más parecido que tienen a un hit. La banda muy enchufada, perfecta ejecución de los temas, un sonido a la altura y una audiencia que al final abarrotó la sala, muy entregada, todo ello devino en un fantástico concierto de los que no se olvidan. Historia viva. 

Texto: Nico García 
Fotos: Pili Pimpinela y Nico García