BAD MUSIC RADIO

Mike Sánchez
XI Festival de Blues de Santa Coloma
Teatre Segarra. Santa Coloma de Gramenet
24.02.24

Mike Sánchez fue el encargado de cerrar el XI Festival de Blues de Santa Coloma. Una edición que ha sido todo un éxito con una gran afluencia de público en todas sus convocatorias. Sus organizadores trabajan sin descanso y la ciudad les devuelve el esfuerzo. Una gran alegría para un mes de febrero casi primaveral en el que es complicado encerrar a la gente en salas. 
Era sábado y tuve ocasión de asistir a una comida con Mike, Mario Cobo y los programadores del festival. Estaba degustando un quinto en la barra del bar y vi cómo Mike entraba a toda velocidad al salón. Me impresionó su envergadura. Un gran hombre, literalmente. Nos sentamos alrededor de la mesa y Mike estaba preocupado por que el backline estuviese a disposición para un último ensayo y sobre todo que la batería estuviera muy cerca de su posición. No quiso tomar alcohol, ni comer demasiado, aunque la carta del restaurante era tentadora. Pronto se abrió a los que allí estábamos. Con un acento británico y el gracejo de un español torpemente hablado. Contaba anécdotas de su vida pasada y actual. Yo buscaba, en su mirada, las mil batallas en las que este gran músico se habría metido. Se me ocurrió citarle a Lemmy sobre una frase mítica de este. Mike buscó en su teléfono y me mostró una foto de ambos. Y así transcurrió esa sobremesa. Entre anécdotas y situaciones divertidas que solo te pueden ocurrir cuando estás con una celebridad en un restaurante de tapas en Santako.

Llegó la noche y El Teatre Segarra se llenó por segunda noche consecutiva. Apareció Mike con su inconfundible indumentaria. Chaqueta blanca, camisa y pantalón negros. Impecable y majestuoso con un gran tupé. Al mismo tiempo apareció sobre el escenario el gran combo que lo acompañaba. Mario Cobo guitarra, Ivan Kovasevic contrabajo y Blas Picón batería. Es decir, el lujo de tener a los Nu Niles en el escenario. Una delicia.

Mike quiere a todo el mundo en pie desde el primer tema. Te convoca y te convence. Quiere que participes y lo consigue. Se te mete en el bolsillo desde los primeros compases. Asistí en primera fila a un gran show, de los que se ven pocas veces. Mike te habla a la cara. Su timbre de voz es de otro tiempo. Arrastra las vocales como un crooner o esculpe frases como el mejor cantante de rockabilly. Tiene un falsete prodigioso. Por sus cuerdas vocales pasan vestigios de las mejores voces de Sun Studios, puedes imaginar a Roy Orbison, Ike Turner, Rufus Thomas, Elvis Presley, Johnny Cash, Jerry Lee Lewis o Carl Perkins. 

Mike se sentía a gusto en Santako y lo dio todo. Repasó lo mejor de su repertorio, Just a Game, Forever True, Highway 60, se lo pasó en grande y lo hizo pasar en grande. No es la primera vez que se hacía acompañar por los fantásticos Nu Niles, con un Mario Cobo de escudero y que ya es un gran maestro a la guitarra. Blas Picón certero, creativo, pendiente de Mike todo el tiempo. Un batería first class en definitiva. Por no hablar del gran Ivan Kovasevic que no necesita presentación. Puede que sea el mejor contrabajista a este lado del Atlántico.

Mike cumplió 60 años la semana anterior. Nos comentó que era feliz teniendo tiempo para componer nuevos temas. Me impresionó ver su pasión casi adolescente dentro y fuera del escenario. RnB, Rock n Roll, boogie, da igual la etiqueta. El show tiene ritmo y no decae. Tocan como una big band, sin olvidar ese punto Punkbilly que asoma de vez en cuando. Fue una gran noche, acabamos todos de pie bailando todo lo que este Gentleman nos propuso.
Texto y fotos: Xavi Malacara