
SCOTT HENDERSON TRÍO + JEFF AUG
Sala Jamboree, Barcelona
21.03.25
Expectación y muchas caras conocidas entre los habituales a este tipo de conciertos icónicos aunque minoritarios. Músicos, muchos, la mayoría seguramente para disfrutar de una leyenda en vivo, como es el caso de Scott Henderson que presentaba un más que merecido sold out en los dos pases de la noche.
Muchas caras de felicidad a la salida del primer pase (a nosotros nos tocaba el segundo) y mucho comentario exaltado: ¿Has visto el tipo? Tocaba fuera todo el rato, o me estaba volando la cabeza con ese salto. La noche pintaba bien…

Nos situamos justo delante del escenario, donde a los pocos minutos apareció Jeff Aug presentando en solitario un set acústico con una selección de temas de su último trabajo, Kiss of the Liquid Moon y resultó el perfecto aperitivo. Tenía un estilo muy peculiar de tocar su acústica y un tono precioso. Es guitarrista de larga experiencia, originario de Washington DC, aunque afincado en el sur de Alemania, como él mismo explicó. Gira tanto en solitario como acompañando a Anne Clark o su banda instrumental, Ape Shifter.
También hizo gala de un jocoso sentido del humor en las presentaciones de los temas, merece que investiguemos más sobre él. Ojito porque estuvo espectacular y se nos hizo corto.

Y ahí estábamos nosotros en primera fila cuando apareció Scott Henderson, un tipo
sencillo que tras ajustar su pedalera, situarse en su silla con su Suhr color aguamarina y despotricar de su presidente actual de una forma muy graciosa e irónica, nos presentó a sus acompañantes que no eran otros que sus habituales colaboradores de los dos últimos trabajos: Romain Labaye al bajo y Archibald Ligonnière a la batería.
Mientras bromeaba con el público sobre las grabaciones con los móviles empezó a
desgranar su particular intro, antesala del tremendo espectáculo que nos iba a ofrecer, al entrar de lleno en los magníficos pasajes de All Blues.
Si lo tienes delante, una de las cosas que más llaman la atención es la forma que tiene de usar la púa, tocando con la parte superior de la parte ancha en lugar de la punta y ciertamente consigue un sonido más denso y con más cuerpo. Otra es como se desliza por el diapasón y dobla cuerdas. Y sobre todo como usa la barra de vibrato y las escalas.
No fue hasta el tercer tema que entró en su último trabajo, Karnevel! que es lo más
parecido a ir a una feria en la que los sonidos se fusionan para llevarte directo al tiovivo. Porque este tipo cuenta historias, con lenguaje diferente, pero las cuenta. Usa intensidades, tono, inflexiones y una vez aprendes su idioma, ya quedas rendido.
Covid Vaccination fue otro de los temas del nuevo trabajo, es un trote hacia la locura con partes que van desde la calma al caos y vuelves a oír una historia, la historia que quiere contar. El sonido estuvo impecable y nos permitió sumergirnos en lo más parecido a una película en versión original con subtítulos donde no controlas al 100% el idioma y no quieres leer porque no te quieres perder el diálogo ni la interpretación. Es en ese momento que si consigues abrir tus oídos sin preocuparte por el “subtítulo”, te sumerges en las historias que cuenta sin ningún tipo de interferencia. Como en el tributo de Tower of Power.
Él obviamente, armoniza en otra liga y queda patente en temas como Bilge Rat con un aire más bluesero, sucio e incluso desapacible o Sky Coaster donde alterna pasajes más jazzísticos sin importar lo que armónicamente lo complique con esos giros que se suceden a cada momento.

Este hombre toca desde el alma por la forma en que ilumina el diapasón. Tiene la particularidad de sostener mucho cada nota en el uso de las escalas y genera una
sensación muy diferente a la habitual, ya que, no solo las espacia, sino que diría que deja de tocar algunas notas generando un impacto muy potente que te desorienta, pero a la vez te produce un efecto de dependencia en tus sentidos, como ocurrió con la melancólica Peace, de sentidas y preciosas melodías.
Hubo espacio para un solo de lucimiento del bajista, Romain Labaye, que ciertamente mantuvo un groove impecable todo el tiempo, dando paso a su compañero de combo, Archibald Ligonnière, que estuvo contenido a la batería pero con un perfecto control.
De vuelta al escenario, Dolomite de Tore Down House, otro tema a destacar y uno de mis preferidos. Es ahí donde mejor consiguió ese ansiado sonido, una especie de mezcla de slide con ecos de vientos de los que surgieron unas notas de auténtica y preciada grasa.
Parecía que llegábamos al final, pero aún hubo tiempo para un tema más: El Hole Diggin’ del Dog Party en el que se pudo oír a más de uno aullar con él (entre los que me encuentro). Fue un final perfecto y de auténtica conexión con los asistentes.
Alquimista de la Fusión sería la palabra que mejor define a Scott Henderson, la segunda sería el sonido que consigue al usar la palanca (de hecho está en su mano la mayor parte del tiempo) buscando ese sonido slide que fusiona en mil y un acordes. Y la tercera sería la perfección en el tono.
Si pasa por tu ciudad no te lo puedes perder.
Texto: Lady P (P.D. Well to the Bone)
Fotos: JLBad


Deja un comentario