
COLOR GREEN
Sala Upload, Barcelona
16.07.25
Noche sofocante de calor, que no sabías dónde colocarte para conseguir un poco de paz, y que muy inteligentemente, la sala dejaba salir el aire acondicionado con más fuerza en la barra del bar.
Poca afluencia de público si tenemos en cuenta la calidad demostrada por los chicos de Los Angeles, pero no fue pretexto para la desidia o pasividad de la banda o de la gente, que se demostraron mutuamente que el rock psicodélico está hecho para la conexión cósmica a través de la música.

Rápidamente comprobamos que su presencia en el escenario iba a resultar bastante austera, sin demasiados aspavientos o filigranas, al mismo tiempo que la atmósfera creada se empapaba de estructuras jamming, dominada por el sonido del amplificador VOX de Noah Kohll, no por superioridad técnica, más bien porque el ampli Fender de Corey Madden estaba sonorizado a más bajo volumen durante todo el concierto.
Los dos guitarristas se iban intercambiando la papeleta de cantar los temas, Kohll se encargaba de la lisérgica «For Leaf Clover», mientras que Madden hacía lo propio con la oscura «Ruby», contando todas las piezas interpretadas por unos coros preciosistas de Corey Rose, una batería que hay que darle de comer aparte. Menudo show se marcó Rose, dominando el espacio-tiempo toda la noche, aupándose en ocasiones en líder de la formación y marcando los pasos a seguir, mientras que Kyla Perlmutter al bajo y los dos guitarristas se giraban para seguir sus instrucciones. Una batería excepcional, que por lo demás, hace que parezca terriblemente sencillo todo lo que toca, sin serlo.

El concierto fue in crescendo a medida que pasaban los temas y la banda se sentía cómoda, el espíritu jam band se dilató y nos dejó los mejores momentos de la noche, con Madden golpeando el cuerpo de su Fender o jugando con el potenciómetro del ampli para manipular las notas. Temas como «Night», «God In A $» y «Ain’t In Sad» marcaron el final de una actuación especialmente revitalizante, por lo que el poco numeroso respetable demandó el bis de rigor que vino de la mano de un gran «High And Low», donde la voz de Rose se plantó de forma sobresaliente en la cabeza de todos. Terminado el show, todas las miradas y elogios tenían el mismo punto de apoyo, Corey Rose.

Si faltaste a la cita de la Montaña Mágica de Montjuic, en una noche que la psicodelia de Upload competía con los ritmos callejeros y aflamencados del G5 en la Plaza Mayor del Poble Espanyol, apunta el nombre de Color Green, una formación con bases de Grateful Dead, The Flying Burrito Brothers, The Band, más una inspiración primordial para la improvisación… La próxima vez, no lo dudes, no te lo puedes perder.
Texto: JL Bad
Fotos: DBruc / JLBad


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