
TOY DIVISION
Ratpenat
Estraperlo Club, Badalona
28.09.25
Repetimos de nuevo en una sesión de Toy Division, esa extraordinaria iniciativa que acerca la música rock sin miramiento de estilos a los más pequeños, que responden de forma maravillosa a la propuesta. En esta ocasión, como veteranos de esta sesión vermut, llegamos a tiempo para ver algunos cortos infantiles que se pasaron previamente al concierto, y dicho sea de paso, el equipo de Bad Music disfrutó como enanos sobreexcitados de azúcar.

Pasada la una del mediodía salieron Ratpenat al escenario de Estraperlo y sorpresa, Mikki con camisa estampada y aire formal; poco duró la compostura…
Era la primera vez que los veíamos presentando ese magnífico trabajo llamado Camí al’infern, editado por Kasba Records en marzo de este año y mereció hacerlo en una sesión especial.
Siempre se acelera el pulso y remueve el alma con la música de Ratpenat, esa mezcla de punk rock que destilan Aleix Costa al bajo y Mikki «Puto» Viñé como histriónico maestro de ceremonias, con la vertiente más heavy de Rubén Cahón a la guitarra y Sergi Moreno en los parches; el resultado es altamente contagioso. Otro atractivo de la banda es la sinergia que mantienen entre la reivindicación, la protesta, el sentido del humor y el gamberrismo urbano, cuando se juntan esos ingredientes son altamente indecentes y corrosivos.

Poco a poco se iban desgranando los temas y tanto los peques como sus progenitores se desenfundaban el sudor, cerveza, refrescos y patatas fritas, para sumergirse en «La Danza Macabra», coreaban «Això no és una cançó de amor», o daban más piruetas que una peonza con «Ens podrirem a Rodalies».
Mikki comenzaba a quitarse ropa y quejarse de que los años no pasan en balde, pero seguía disfrutando en el escenario más que los niños en la olla, quizás por eso se lanzó al meollo de la cuestión y adoctrinó a las nuevas generaciones a gritos de «Barcelona ha mort», aunque personalmente me faltó y puedo equivocarme, el gran tema que es «Tourist Go Home».
De esta forma tan políticamente incorrecta llegábamos al estupendo cover del himno de Quico Pi de la Serra, «Si ells fills de puta volessin no veuríem mai el sol», donde perdí al menos dos cuerdas vocales en el intento de berrear como mandan los cánones.

Para finalizar la reconversión de la futura generación de irreverentes personajes, desplegaron todo un arsenal, eso sí, con Mikki ya enfundado en su frac habitual, es decir, en gayumbos, balera de cinturón y medias a medio muslo. Ahí aparecieron temas como «El Pacta amb el Diable», «Terror, pizza i r’n’r», «Demà podríes ser tu» y «La Destrucció»… pero ahora que lo pienso, también baile y canté «No sóc skin, sóc calvo»… es posible que no sea el orden de temas, o quizás no estuve allí, probablemente habrá sido una buena pesadilla… qué más dará. Lo único que sé a ciencia cierta es que todos, tú también, vamos «Camí a l’infern» de cabeza.
Toy Division es un gran proyecto, que merece todo nuestro apoyo, al acercar los niños al rock, que es mucho menos peligroso que arrimarlos a los curas.
Texto y fotos: JL Bad


Deja un comentario